José Luis Miralles "llagostí a la Lligotària" - Ciclo "Los imprescindibles de San Miguel"

Recientemente, y con motivo de la estancia de la Lligotària en la Sala Sant Miquel de Castelló, la Fundació Caixa Castelló ha realizado con el pianista castellonense José Luis Miralles la grabación de dos piezas del repertorio expresivo de Carles Santos (Vinaròs, 1940-2017), ‘La Convalidació o la Cançó del Tremall’ perteneciente al álbum ‘Pianotrack’, de 1990 y el movimiento final de ‘Fins l’últim llagostí’ de 1988. Por esta razón, la Fundación Caja Castellón programa para el próximo sábado, 17 de febrero, el concierto ‘Llagostí a la Lligotària’ a cargo del pianista José Luis Miralles.

Carles Santos es un músico de repertorio variado y extenso. Atraviesa diferentes movimientos históricos, como el renacer de la vanguardia histórica con Fluxus, el conceptualismo, el minimalismo musical americano o la conciencia postmoderna. Además, su trabajo se inserta en el espacio de la intersección de diferentes lenguajes artísticos, como la música, el teatro y las artes plásticas. Pero, ante todo, nos encontramos ante un músico que además de componer y concebir la música como organización del sonido, indagó sobre su materialidad, su escritura, su relación con otras artes y, en definitiva, su sentido.

Es necesario destacar, en primer lugar, el prominente lugar que ocupa el piano en muchas de sus creaciones escénicas, performísticas y filmográficas. Aparte, está la obvia circunstancia de que el piano es el punto de partida de la genealogía artística de Santos, ya que el inicio de su carrera se produce como intérprete de piano -aspecto que, por otra parte, no abandonó-.

El piano, pues, aparte de ser el instrumento con el que interpretó y compuso, adquirió una dimensión como objeto fetichista presente en gran parte de sus creaciones y representando diferentes relaciones (piano/tortura, piano/trabajo, piano/sexo…), pasando por todas las fases de las grandes pasiones. Así, la presencia del piano como objeto es una constante inspiración en gran parte de su producción escénica y cinematográfica.

Santos interpreta a Bach, Chopin, Brahms, Schubert, Wagner… pero también compone y toca, evidenciando el papel central del piano en su creación, hasta llegar a la pianola, un instrumento que cobra vida propia y se convierte en un personaje que, según palabras del propio Santos “baila su propia música, se mueve, gira, va y viene. Yo no estoy, pero queda la pianola arriba, todos estamos sometidos al rigor absoluto de esta máquina…. Al principio descubrí sus características peculiares. Instrumentalmente es capaz de hacer cosas que una persona no sería capaz de hacer, pero al mismo tiempo es una máquina y, por tanto, no tiene la presencia ni la sutileza que tiene una persona tocando el piano”.

Lligotària es un personaje-máquina de Carles Santos que interpreta e interactúa en el espacio a partir de una pieza de Bach. Fundació Caixa Vinaròs, propietaria de la Lligotària, la ha restaurado para la ocasión. La Lligotària es una pianola marca Aeolian construida entre 1925-1932 y adaptada por Carlos Santos para sus espectáculos. La primera vez que fue utilizada fue en 1994. Tiene motores de movilidad en todos las direcciones y mando a distancia. Está equipada con una fuente de alimentación de cuatro baterías conectadas a un convertidor. Tiene motores de tracción, dirección, elevación y aceleración e incorpora un sistema automático de parada de emergencia. Desde el mando a distancia se pueden controlar todas las funciones de movilidad y de la pianola. Con ello se genera una curiosa obra escultórica en movimiento que muestra la apasionada relación de Carles Santos con sus pianos. Un elemento de lo más notable de la obra de Santos, un artista capaz de generar un universo poético, musical y visual coherente, radical y comprometido con su época y con el público.

José Luis Miralles es natural de Villarreal (1985), es un compositor, intérprete, profesor e investigador musical que desarrolla su labor principalmente en la provincia de Castellón.

El camino de la experimentación musical ha llevado a este músico villarrealense a aventurarse y cuestionar lo que entendemos como estilos musicales. Desde su temprana formación en la tradición musical clásica de conservatorio, siempre ha mostrado inquietud por la interpretación y creación de música contemporánea y experimental. Proyectos suyos, como Sonotrazos (2017), han sido presentados en lugares tan dispares como auditorios, ferias de arte contemporáneo, escuelas de diseño o discotecas; fusionando sinestésicamente el mundo de la imagen y la música mediante partituras gráficas.